No siempre soy igual en lo que escribo y digo.
Cambio, pero no cambio mucho.
El color de las flores no es el mismo al sol
Que cuando pasa una nube
O cuando entra la noche
Y las flores son color de sombra.
Pero quien mira bien ve que son las mismas flores.
Por eso cuando parezco no concordar conmigo,
Fíjense bien en mí:
Si estaba vuelto a la derecha,
Me volví ahora a la izquierda,
Pero soy siempre yo, firme sobre los mismos pies,
El mismo siempre, gracias al cielo y a la tierra
Y a mis ojos y oídos atentos
Y a mi clara simplicidad del alma....
Fernando Pessoa